Reclamar tarjeta revolving Cetelem

1. Reclamación directa a Cetelem

Cetelem ofrece canales como correo electrónico, postal o fax para presentar reclamaciones.

No obstante, esta vía rara vez resuelve el problema de forma satisfactoria para el cliente, ya que la entidad suele defender la validez del contrato para justificar que si es legal esta mala práctica..

2. Asesoramiento jurídico con Apolo Abogados

Nuestra experiencia en reclamaciones contra entidades financieras nos permite ofrecerte una solución real y efectiva.

Somos un despacho especializado en tarjetas revolving y hemos conseguido numerosas sentencias favorables para nuestros clientes.

3. Plataformas de reclamación online

Existen sitios web que permiten iniciar el proceso mediante formularios automatizados. Sin embargo, estas plataformas no ofrecen una atención jurídica personalizada ni incluyen el trabajo conjunto de abogado y perito como sí lo hacemos en Apolo Abogados.

4. Organismos de defensa del consumidor

Puedes acudir también a la Dirección General de Consumo o a asociaciones de consumidores. Aunque son recursos útiles para informarte, no sustituyen la acción legal profesional que requiere este tipo de reclamaciones.

Muchos clientes están recibiendo propuestas de acuerdo por parte de Banco Cetelem, generalmente como respuesta a una reclamación previa o como intento de evitar un juicio. Sin embargo, desde Apolo Abogados desaconsejamos firmar ningún acuerdo sin asesoramiento legal previo.

Algunos de estos acuerdos pueden incluir cláusulas que impidan futuras reclamaciones o que limiten la cantidad recuperable, incluso cuando legalmente correspondería mucho más. Es fundamental analizar estos documentos con un abogado especializado, ya que aceptar precipitadamente podría perjudicar tus derechos y tu economía.

Apolo Abogados ha conseguido importantes resoluciones judiciales a favor de los afectados por tarjetas revolving de Cetelem. Más del 90% de nuestras reclamaciones han sido estimadas por los tribunales, que reconocen el carácter abusivo de los intereses y la falta de transparencia en estos contratos.

El Tribunal Supremo ya ha dictado varias sentencias clave —en noviembre de 2015, marzo de 2020 y febrero de este año— que confirman la nulidad de este tipo de contratos cuando se aplican intereses considerados usurarios o no se informa adecuadamente al consumidor. Estas resoluciones se apoyan tanto en la Ley de Represión de la Usura como en la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios.

Las tarjetas revolving funcionan bajo un sistema de pago aplazado que permite fraccionar las compras o disposiciones de efectivo en cuotas mensuales.

A diferencia de una tarjeta de crédito tradicional, en la que el pago se realiza a mes vencido, con una revolving se devuelve en pequeñas cuotas periódicas. Esto implica que muchas veces no se cubre ni el capital prestado ni los intereses generados, lo que provoca que la deuda se alargue indefinidamente.

Este mecanismo de pago puede parecer cómodo al principio, pero en la práctica puede llevar al usuario a una espiral de endeudamiento difícil de controlar. Además, los intereses aplicados suelen superar el 20% TAE, lo que ha sido considerado por numerosos tribunales como usura.

Algunas tarjetas revolving de Banco Cetelem aparecen comercializadas bajo la denominación “tarjeta de crédito Flexipago”.

Aunque en apariencia funcionan como una tarjeta convencional, su funcionamiento es mucho más complejo de lo que parece.

Estas tarjetas permiten fraccionar las compras en pagos mensuales, pero las cuotas suelen ser tan reducidas que apenas se amortiza el capital prestado.

Como consecuencia, la deuda se mantiene o incluso aumenta con el tiempo, generando intereses muy elevados. Este sistema, considerado poco transparente y abusivo, ha sido objeto de numerosas reclamaciones judiciales.